lunes, 20 de febrero de 2012

No hay mal que dure cien años

Desde pequeño te invitan a ser feliz, pero para eso utilizan los cuentos y las falsas espectativas de la vida; te hacen creer en cosas que en historias para soñar se quedan, en la vida real es imposible ponerlas en práctica. Siempre te impulsan y te dicen que la vida es como un columpio, que puede darte vértigo, pero que mientras te deslizas vas disfrutando; continúan engañándonos, pues la vida no es más que sacrificios en vano, tarde o temprano, puede que cuando menos lo esperes, desaparecerás y con ello se irá todo lo que hayas construido. Unos somos más privilegiados que otros, es más te dicen, que siempre hay que ser honrado y que hay que aplicarse el dicho "lo que no te gusta que te hagan no se lo hagas a los demás", ¿pero de qué sirve? Maldecimos todos, y quien diga que no miente, esta sociedad. Antes o después te destruye, destruye tus sueños y tus ilusiones. No todos tenemos valor para decir las cosas siempre en el momento adecuado, recuerdo cuando me decían "lucha por lo que quieres"..maldigo cierto momento en que lo puse en práctica y que es más, con una vez que fallé no fue suficiente, lo volví a intentar, y para que, para derrochar tiempo. Para sentir emociones inalcanzables que al sentir la verdad te hacen perderte en la mayor oscuridad.
Sé feliz sí, y disfruta de todo lo que tengas, pero vive aceptando que nada es suficiente, que vas a volver a tropezar, aunque lo estés haciendo bien. No creas en el karma, pues siempre hay gente demasiado lista que sabe como jugártela sucesivas veces sin importar como y donde terminarán. Vive aceptando que la felicidad no estará ahí siempre. Vive aceptando que no porque los pequeños detalles te hagan sentir bien tienes que conformarte con eso, ve a por todas y que te critiquen muchas veces. Siéntete tú bien y lo demás saldrá como deba salir, llora cuando lo necesites y no te avergüences por ello, el sol volverá a salir y es algo que todos sabemos.

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