Mientras sus amigos se reían más. Él no era así, no conmigo. Pero sus amigos le hacían influenciarse. Le miré y le dige que no me esperaba eso de él, nos miramos fijamente y me dí la vuelta para irme.
Cuando dí tres pasos, escuche mi nombre y su mano cogiéndome por le hombro. Me dio la vuelta y me pidío perdón, que sabía que no me lo merecía y que no estaba con esa chica. Le sonreí demasiado estupidamente. Era el amor que me ganaba. Me acerqué y el se alejó. Me digo que esto no significaba nada. Pues se iba a ir y le cogí yo, le dige que estaría ahí siempre. Pero el digo que no me quería, que no quería nada conmigo. Yo le respondí que hablaba de mi, no de él. Que le esperaría, que le amaba y que sabía que no me fallaría. Que no diría nada. Que aunque él no sintiera lo mismo yo no podía cambair lo que sentía, que me sentía orgullosa por querer a alguien como él.
Se dio la vuelta y me soltó, ni si quiera pudo mirarme a la cara. Corrí detrás de él y me puse delante.
-¿Qué te pasa?
·QUE TE OLVIDES DE MI, siempre te emocionas, no te das cuenta. Nunca estaré contigo.
-Eso no es suficiente, tu mirada me dice otra cosa. Que tan solo tengo que demostrarte que yo solo te quiero a ti. Y si a veces siento orgullo y me derrotan tus palabras. Pero entiendeme que yo ..
·Que tú nada, ya he escuchado suficiente. No deví volver y decirte nada. Despierta. Lo nuestro es imposible.
-¿Por tus amigos verdad?¿Por no ser la más guapa? Ese es tu problema, es tu problema si te haces daño cada vez que te digo que te quiero y no puedes decirme lo que sientes.
·Que te calles ya niña, lárgate.
Meses después sigo esperándole. Prometí que no me olvidaría de él, y ni aún intentándolo. No hay nadie como él. Y aunque me digan que es un chico parche, sé que tiene millones de cualidades por las que me gusta tanto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario